1 Por mucho tiempo hemos considerado al arte de narrar y al arte de ensayar como escuelas distintas. Quizá demasiado tiempo. Y no es que las divisiones sean nocivas, pero hay que reconocerlas ilusorias, acaso útiles sólo para el estudio, para la visión panorámica, aunque no más reales que la niebla. 2 En un artículo …