Single Player
por Salvador Martínez Las maquinitas cerraron un día después de que me dieron el Game Boy, que por la devaluación ya no podían pagar la renta, que ya no íbamos tantos al local porque en todos lados estaba el play, pero yo no tenía el play y al menos Migue y yo fuimos hasta el …
El vago, mi maestro
por Francisco S. Contreras Mendoza Todo esto empezó por ahí del año 1988, estaba en mi tierna mocedad, aún no cumplía el doble dígito y, como eran otros tiempos, mi madre me enviaba a hacer algunos mandados a la tienda de la esquina. Por ahora no recuerdo qué fui enviado a comprar esa tarde, pero …
Vigilia
por Ilse Gámez Uno siempre espera grandes aventuras, grandes intensidades existenciales, y cuando mira hacia atrás se da cuenta de que en realidad no pasó nada. La literatura es un modo de transformar esa nada en algo. ―César Aira Sabes que son las dos por el reloj de pulsera que tienes a un lado de la cama, todas las noches lo …
Qué diablo más pendejo
por Daniel Domínguez Toledo Lo conocí en el pasillo de vinos y licores de Chedraui, tenía sobrepeso, aunque no lucía gordo, sino más bien parejo, como suele decirse. Era más chaparro que yo y tenía el cuello y los brazos tapizados en tatuajes, figuras que nunca pude distinguir. Esa tarde hubo muchas promociones en el …
Andanza cotidiana
por Mauricio Amparán En el vagón del medio, a las seis de la tarde, Raúl transpira sin parar, transpira sin parar porque está preocupado, también porque a esa hora el metro va hasta la madre, no sabe si es afortunado por ir sentado o si estaría mejor parado; transpira como transpira el hombre que va …
Niños perdidos (notas sobre el tabaquismo)
por Francisco Payán Siento que mis pulmones no dan para más. La sensación de estar a punto del colapso me ronda de días para acá. He decidido cientos de veces que abandonaré el cochino vicio, así, sin más, pero siempre fracaso. Quisiera despertar ligero, lejos de esta costra que se ha instalado en mi pecho. …
Crónica de la vida después de la muerte
por Javier García Vargas Cuando el corazón deja de latir, el ser humano debe enfrentarse a la más grande de las contradicciones, pues, paradójicamente, es en ese momento cuando la vida florece dentro del cuerpo. A menos que el difunto sea intervenido ―con meticulosas técnicas de disección―, embalsamado ―como hacían con sus muertos los antiguos …
Porque les caí bien
por María Gu Era otra de esas mañanas bochornosas que siguen a un aguacero. Aun así, tuvimos que formarnos en el patio encharcado de la primaria para rendir honores a la bandera. Era una de esas ceremonias por las que se hace pasar a los niños para sentir que se les educa bien. Todos apretábamos …