por Nabor Rachowsky
Shin Min-a
–me pregunto si sabe español
porque la posibilidad
de traducir este poema
a coreano
está en chino–
qué destino tan trágico y caprichoso
el de nacer en naciones
y culturas distintas
quizás ahora usted se encuentre
contemplando rosas de Sharon
en algún suburbio de Seúl,
mientras yo me encuentro
mirando ladrillos rojos
dentro de un Infonavit
no importa
yo he venido a hablar
de la belleza altiva
que despliega
cuando come ramen
en alguno de los doramas
o películas que protagoniza,
de la ternura en los hoyuelos
de su sonrisa,
de tersa piel
y dulces labios…
bueno
ya la googlearan
y tal vez comprendan
la angustia
que me recorre la médula
al pensar que las repúblicas
evitan el libre tránsito
de un país a otro
sin documentos,
al mercantilismo
que nos sujetan
las naciones
para anhelar
sin ser recompensados,
a las políticas y leyes
creadas únicamente
para complacer
a unos cuantos,
a la impunidad de la
ambición y el poder,
a la austeridad
en que viven miles de familias
con la esperanza rechinando
como una bisagra oxidada
en la puerta,
al olvido que son sometidas
las injusticias…
en fin
de cualquier forma
sospecho que todo intento
por conocerla
sería vano.
por cierto
¿el símbolo de besos
y abrazos
es universal?
XOXO
Nabor Rachowsky ha publicado algunos textos en revistas como: Traspatio, La Piedra, Artificial Radio, Lado B, Sputnik y Revista Himen. Últimamente ha perdido la voluntad de escribir, y con un poco de suerte quizás se quede así.