Flores marchitas
Por Yuly Ayala Hacía tiempo que ella no se sentía así. Se miró en el espejo y se peinó los cabellos platinados, como el metal bajo el sol. Vio su reflejo, desnuda, y se sintió a gusto con lo que observaba: la infinidad. Él se asomó a la puerta como de costumbre, lo único …
Espontaneidad
Por Erick Lema Casa …la gente que se da citas precisas es la misma que necesita papel rayado para escribirse o aprieta desde abajo el tubo de dentífrico. —JULIO CORTÁZAR, Rayuela (1) Érase un hombre que caminaba silencioso por las silenciosas calles de Edimburgo. Iba distraído, abrevando su memoria en los mismos recuerdos una y otra …
Una melodía queer
Por Ximena Cobos A Rubén Arzaval se le rompió la verga y la sangre le sobrevino como una menstruación inesperada. Subió a su bicicleta y dejó a aquella chica de sexo ocasional tendida en la cama de su departamento de tanta que fue su desesperación. Se le había roto el frenillo, le dijo el …
El traspaso
Por Juan Carlos Espinosa Cuock Nació deforme, producto de la relación forzada entre un hombre senil y una muchacha. Abandonado por su madre y dejado a la suerte, sobrevivió y creció solo. La gente se lo atribuyó a muchas cosas, todas especulaciones; ya fuera el desproporcionado tamaño de su corazón, presunciones tan vagas como …
Shadow Link
Por Gilberto Nava Rosales Encender la consola. Pantalla en negro: Logo //Nintendo 64// que se desvanece tenuemente. Ocarina de fondo: melodía de cuna. Presionar Start. Fiesta de cumpleaños. Medio día. Un grupo de geeks parlotean sentados en el suelo mientras castean hechizos desde sus manos. Todo muy sano, miopemente sano. Accediste a ir …
Algunas minificciones
Por Alberto Puebla. De música Jaló el gatillo. De lo hondo del arma sonó el Réquiem de Mozart y me di por muerto. De masoquismo Le ofrecieron el perdón; prefirió la cruz. Un traje viejo Por decreto real se ordena que todo aquel que dude de la divinidad del Emperador será ejecutado; que …
Cómo cocinar un corazón
Por Jonathan Alcalá (porción individual) Antes que todo, es recomendable elegir un corazón de unos veinte a cuarenta años de edad; es prácticamente imposible encontrar alguno que no se haya roto, sin embargo, eso le proporciona un sabor especial. Una vez que se tiene la víscera, se lava con agua fría para retirar sangre, nervios …
Mana, mana, eres mi hermana
Por Amanda R. Pérez Para Paula Llovía. A cántaros. Llovía a cántaros ceniza. Ceniza en Puebla. Yo no sabía qué hacer sino rascarme la cabeza y contar una y otra vez: uno… dos… tres… cuatro… Ella hacía “trururú” desesperadamente, como loca, como loca desequilibrada. Luego se puso a barrer la entrada de la casa. …
El día que maté a Parra
Por Raquel Cabrera La mesa era cuadrada y a diferencia de muchos que se jactan de sus espléndidas charlas de sobremesa en un café, yo estaba en una pulquería. Las jarras corrían y como siempre tiene bien a suceder, en lugar de hablar de cosas graciosas, de experiencias amorosas o de aventuras de nuestra adolescencia, …