por Ulises Granados   En toda la extensión de la palabra, de inicio a fin y de norte a sur, desde la salida del sol hasta el anochecer, soy un hombre gordo: Mi existencia utiliza más espacio del que necesitaría de contar con treinta kilos menos y mi desplazamiento por el mundo se vale de …

por Rodrigo Mora   Ácaro Tardó con su paseo, cuando llegó encontró que habían cambiado las sábanas, todos habían desaparecido. El ácaro triste escribió canciones al filo del buró, esperando una sábana nueva para acurrucarse.   Catarina Veinte gotas de agua vertidas en el asfalto, la catarina se movió y se retorció. No importó cuántas …

por Esteban Reynoso Carlos   “El novio y el esposo son dos personas distintas”, dijo mamá, en lugar de felicitarme, cuando le informé que me iba a casar. “No importa cómo te llevabas con él antes, en cuanto te cases te va a tratar diferente. Todos los hombres quieren cortarse en cordón umbilical con sus …

por Diego Quintero   Imagínelo: es invierno y usted sale en busca de Xun para que vayan a deslizarse por las colinas aledañas al complejo de edificios donde los dos residen y llega al apartamento de su amigo justo a tiempo para la hora del té. Después de agradecerle a la señora Huey la hospitalidad, …

por Felipo Zaná   Quién lo hubiera creído; a pesar de su miopía, Cristina fue la primera en notarlo. Sin embargo, ahora de nada sirve pensar en ello. Ninguno de nosotros hubiera tenido el valor para matarlo, ni siquiera Jorge que gustaba tanto de derribar pajaritos con su cauchera o Dalia que cazaba ratones con …

por Julia Bonilla   Escribo para recordar cuánto vives en mi memoria. Y he necesitado de un par de textos para apretar mis puños y negarte dos veces. Perdono, porque las noches solitarias me enseñaron a hacerlo lloro, porque ante el silencio no hay ruido más extraño que tu nombre te compadezco, porque compartimos la …

por Darío Espejo   Te vio sentada al borde del camino, con los codos apoyados en las piernas y la mirada perdida. Repleta del polvo seco de una mañana llena de calor y vacía de humedad. Me dijo que tu piel lucía escamosa y que tus labios estaban llenos de pellejos resecos que se te …

por Javier Villaseñor V.   […] todo lo escrito en ellos era irrepetible desde siempre y para siempre, porque las estirpes condenadas a cien años de soledad no tenían una segunda oportunidad sobre la tierra. —Gabriel García Márquez, Cien Años de Soledad   A quien encontrase esto: Desperté hoy y decidí que te buscaría, que …

  I   croa el lago el silencio del sapo mudo   II   Qué pasará si muero hoy que he conocido el arrepentimiento hoy                que pastan los cuerpos de tu hijo en la sangre de tu Iglesia   que digo que pequé para alimentar a los míos …

por Miguel Ángel Real   Porque hemos esquilmado las palabras comienzo a pensar en el fin del mundo, en la parálisis de cada brizna de hierba esperando inútilmente alguna vieja lluvia. Pero en este silencio no hay apocalipsis, nubes atómicas ni efectos especiales: nada más que la calma de las lagartijas; los profetas son solamente …