Tres poemas cercanos al fin del mundo


 

I

 

croa el lago el silencio del sapo mudo

 

II

 

Qué pasará si muero hoy que he conocido el arrepentimiento

hoy

               que pastan los cuerpos de tu hijo en la sangre de tu Iglesia

 

que digo

que pequé para alimentar a los míos

que arranqué la carne del puerco

para sanar mis rodillas y seguir hincado

 

te pregunto

qué pasaría si hubiera muerto antes

de conocer el perdón

el arrepentimiento

o el pecado

 

me respondes:

de todos los muertos y vivos que conozco

del color de cada cadáver que tuve entre mis brazos

del tamaño de cada miembro que arranqué

de las lágrimas de los padres y de los hijos

 

No pasará nada si mueres el día de hoy

 

 

III

 

Te lo digo a ti, porque sé que me escuchas

y no quiero sentirme solo

 

que no hay fin después del fin

que me duele ver el río en su cauce y no alcanzar

a oír el desemboque del agua en la nada

            que me hace creer que la nada no existe

                        Qué bello es mentirse a uno mismo

 

Te lo digo

 

que llueven piedras y mi cabeza es un charco

que he visto partos y matanzas

y tengo la única certeza

                                   de que ambos actos son una carnicería

 

he visto los ojos de mis iguales

y no me vi en ninguno de ellos

 

                        vi la muerte de todos

                                       y con los ojos de todos vi mi propia muerte

 

le tendí la mano al ser vivo más longevo del mundo

 

vi al hombre invencible derrotado por el HOMBRE

y vi todos los milagros suceder en el mismo momento

 

 

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