por Gerardo Hernández “El sinólogo […] y todos los demás personajes de la novela […] no sólo expresan desdén o falta total de compasión unos por otros, sino que también vienen presentados por su creador en términos inequívocamente despectivos”—Sergio Nudelstejer, Los espías de Dios: Autores de fin de siglo Hay acontecimientos que rompen el tiempo, …

por Rodolfo Ruiz Vázquez I La habitación de Joaquín se ubicaba en el segundo piso. Desde el reposet, su perspectiva del exterior era bloqueada parcialmente por un reproductor de música y una enciclopedia, situados ambos sobre un mueble de caoba. Sólo veía, del jardín, el olmo y la madreselva, y, allende la barda, fragmentos de …

Nota: esto es un análisis del libro Cementerio de animales y las dos películas (1989 y 2019) basadas en éste, por lo que el texto contiene muchos spoilers. Él la abrazaba y la mecía, convencido, con razón o sin ella, de que Ellie lloraba por el carácter inapelable de la muerte, por su impasibilidad ante …

por Joana Medellín Herrero 1Háblame,háblame ahora de tus ojos afilándose como el puñal de la noche,de las memorias de futuros imposibles,marchitos como tus cabellos sobando la arenamezclándose con el sabor de la fruta verde.Háblame,háblame de la verdad de tu ocaso,de tu resistirte a la muertemientras flotas jugando a Ofelia sobre las aguas.Mira,mira tu ternura deshacersecastígalos …

por Jair G. Márquez ¿Poseeré la suficiente música dentro de mí como para no desaparecer jamás? Hay adagios tras los que no puede uno ya pudrirse. -E. Cioran Nada representa el rostro y el ritmo del “divino laberinto de las causas y de los efectos” como la música. Porque música hay en tiroteo redoblado de …

Según fuentes altamente científicas que encontramos en Google, las hormigas son incapaces de escuchar sonidos. Sin embargo, aquí en Marabunta nunca hemos sido mucho de seguir las reglas, por lo que nuestras hormigas esclavas desarrollaron un método de apreciación auditiva usando las vibraciones de unos alambres de cobre que pegamos con baba al techo de …

Daniel Wence escribe desde los registros corporales, pre-verbales, semióticos. “Podemos nombrar la vida, el mundo y nuestra existencia a través del cuerpo”, dice.