por Daniel Domínguez Toledo Lo conocí en el pasillo de vinos y licores de Chedraui, tenía sobrepeso, aunque no lucía gordo, sino más bien parejo, como suele decirse. Era más chaparro que yo y tenía el cuello y los brazos tapizados en tatuajes, figuras que nunca pude distinguir. Esa tarde hubo muchas promociones en el …

por Angélica Disa Desgarradura Y es cierto.Algo se desgarró aquella tarde,como una rasgadura transgresorasobre una tela suaveque suspira al romperse;como esas en la piel, casi imperceptibles–a veces sorpresivas–que empiezan a arder hondo y de repente,así nos ardió después, al separarnos,en una piel mutua pero irreconciliable. Fuimos las dos, pienso,en mutuo acuerdo, cómplices,porque lo hicimos con …

por Renzo Zegarra Ay, no gatito. Pero si estás actuando como una quinceañera. ¿Qué tanto te complicas? A los hombres hay que usarlos, con­sumirlos como un chicle. Masticarlos, darles vueltas en tu boca hasta que se les acaba el dulce. Después los escupes. Sin asco. Y tú que tienes buena labia… aunque quizás ese sea …

por Maritza Alexandra Rodríguez Acevedo La primera vez que vi a Andrea fue durante la clase de Literatura Hispanoamericana; había algo en ella que me hizo imposible apartar la mirada una vez que entró al aula. Quizás era su larga melena de león color chocolate, sus ojos felinos o su piel canela que atraía mi …

por Sobralia Sangrante Julieta, Sandra y la Diabla Amo amarte. Amo amar a esas versiones de ti que se quedan atrapadas en mis historias. Te amo a través de ellas. Amo sus cabellos, iguales a los tuyos.Sus orejas, pequeñas como las tuyas.Sus cuerpos, delgados y pequeños como el tuyo. Las amo, te amo. “Tomó las …

por Sairt Barrón Despierto ebrio, justo cuando el reloj marca las 12:57. Jodidamente tarde, susurro, y me levanto a orinar en el lavabo. Siento hambre y, después, culpa. Mejor lo hubieras dejado en paz, te dijo que no y no es no, aunque después sea un sí, pero poquito. Sí, pero sólo esta noche. Un …

por Sol Girón Estaba dormido la primera vez que te vi. Atravesábamos un baldío arenoso por carretera, que reflejaba los últimos destellos del día que estaba por culminar. En la cajuela estaban nuestras pertenencias: libros, cobijas, una mesa de madera, una parrilla, y, curiosamente, unos álbumes de fotos. Estábamos dispuestos a empezar una nueva vida. …

por Eduardo Barenas Pero no había nadie más fiel que los fantasmas —Mauricio Molina, “Lilit” Viví muchos años en el armario después de asumir tempranamente mi homosexualidad. Una vez que tomé las fuerzas suficientes para confesarlo, pensé jamás regresar ni padecer semejante sensación claustrofóbica de nuevo. Oculté manos temblorosas en los bolsillos, justifiqué la frente …

por Lilian Pérez Mariana estaba boca arriba, desnuda, con Ernesto entre sus piernas, cuando se preguntó si estaba rota o qué diablos le pasaba. Ella y Ernesto llevaban 5 meses de novios cuando ella al fin accedió a que su primera relación sexual fuera con él. Ésta era la tercera vez que lo hacían y …

por Luis Salazar Fue antes del amanecer, lo recuerdo, ese es el mejor momento para tomar el sueño y meterlo a la caja, nomás que a veces no se puede, a veces dejan de soñar o nunca sueñan. Debe uno ser paciente, estar atento, esto es un oficio, no cualquiera eh, no cualquiera. Somos contados …